Mis
huesos se preguntan
por
qué escaparon a tu ternura,
por
qué no sienten el calor
de
tu verbo colorido
hablando
de amor y de futuro
Ahora
sólo son eso... huesos
Estructuras
que sujetan
mi
carne y mi piel
Cuando
tú los envolvías en abrazos,
no
los sentía pesar...
Eran
livianas y sutiles escalas de luz
que
sostenían aquello
que
tú amabas
Mi
carne era un prodigio
de
placer en tus manos,
mi
piel el hermoso tejido
que
cubría tus sueños
Ahora
sólo son huesos, carne y piel
...
Y me duelen los huesos...
4 comentarios:
oh... bellas palabras que han encontrado un ser para visualizarlas.
Sentimiento y sensibilidad.
Qué bonito tiene que ser despertarse con estas palabras danzando a tu alrededor, listas para ser expuestas.
Gracias!
Entré por casualidad...por unas fotografías y me encontré esta maravilla de poema.
Bellísimo...
Lucía
Muchas gracias, Lucía
Perdí mi blog, no podía entrar en él y lo olvidé... Gracias a este comentario que encontré por casualidad, lo he recuperado
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